Artículo 72 del Código Penal español explicado

Los jueces o tribunales, en la aplicación de la pena, con arreglo a las normas contenidas en este capítulo, razonarán en la sentencia el grado y extensión concreta de la impuesta.

Artículo 72 del Código Penal

Análisis del artículo 72 del Código Penal Español

El artículo 72 del Código Penal español establece que los jueces o tribunales, al determinar la pena en una sentencia, deben justificar y razonar el grado y la extensión de la pena impuesta. Esto significa que la sentencia debe incluir una explicación detallada sobre cómo y por qué se ha determinado la pena concreta, considerando el grado (si es la pena en grado superior, inferior, o estándar) y la extensión exacta de la pena dentro del rango establecido por la ley para el delito. Este requisito de motivación permite asegurar la transparencia, proporcionalidad y justicia en la individualización de la pena, mostrando que cada decisión está fundamentada en un análisis cuidadoso de las circunstancias.

Cuándo se aplica la obligación de razonar la pena impuesta

La obligación de fundamentar la imposición de la pena se aplica en todas las sentencias en las que el juez o tribunal debe determinar una sanción para el autor de un delito. En la sentencia, el juez debe explicar no solo qué pena se ha aplicado, sino también por qué se ha elegido un grado específico (por ejemplo, superior o inferior en grado) y por qué la extensión de la pena es la seleccionada dentro del rango permitido.

Esta obligación se aplica tanto si existen agravantes o atenuantes que justifican un ajuste en el grado o en la extensión de la pena, como si no hay circunstancias adicionales. En cualquier caso, el juez o tribunal debe especificar en la sentencia el razonamiento legal y el análisis de las circunstancias particulares que han llevado a la individualización de la pena.

Ejemplos de aplicación:

  1. Delito de lesiones con atenuante de arrepentimiento: Si un autor comete un delito de lesiones y demuestra arrepentimiento sincero, el juez puede decidir aplicar la pena en la mitad inferior del rango establecido para el delito. En la sentencia, el juez debe razonar por qué esta atenuante ha llevado a reducir la pena y por qué la extensión seleccionada dentro de la mitad inferior es proporcional a la conducta y las circunstancias del autor.
  2. Delito de robo con agravante de violencia: En un caso de robo en el que el autor utiliza violencia, el juez podría aplicar la pena en la mitad superior del rango permitido. En la sentencia, deberá justificar por qué la violencia agrava la pena y detallar la extensión concreta, explicando en qué medida esta extensión refleja adecuadamente la gravedad del acto.

Importancia de la motivación en la extensión de la pena

El artículo 72 subraya que no solo debe razonarse el grado de la pena, sino también su extensión concreta. Esto significa que el juez debe analizar las circunstancias individuales y justificar cada aspecto de la pena. La motivación asegura que el proceso de individualización de la pena esté guiado por principios de proporcionalidad y que las decisiones penales no sean arbitrarias, sino fundamentadas en criterios objetivos.

Ejemplo de aplicación:

  1. Conducción temeraria sin agravantes ni atenuantes: Para un delito de conducción temeraria en el que no concurren ni agravantes ni atenuantes, el juez debe aplicar la pena estándar. Sin embargo, en la sentencia deberá justificar la duración de la pena seleccionada dentro del rango legal, explicando por qué esta extensión concreta es adecuada en función de las características del caso y las circunstancias personales del autor.

Transparencia y control judicial

La exigencia de razonamiento en el artículo 72 contribuye a la transparencia y permite un control judicial efectivo, ya que facilita que la sentencia sea entendible y revisable. Esto es especialmente importante en caso de apelaciones, ya que los tribunales superiores pueden evaluar si la individualización de la pena fue justa y acorde con los principios de derecho penal.

Ejemplo de aplicación:

  1. Delito de fraude con reducción de pena en grado: En un delito de fraude donde el autor colabora activamente con la justicia, el juez podría reducir la pena en uno o dos grados, atendiendo a la importancia de la colaboración como atenuante. En la sentencia, el juez debe explicar el motivo de la reducción y justificar la extensión exacta de la pena reducida, permitiendo así que esta motivación sea revisada en caso de apelación.

Conclusión

El artículo 72 del Código Penal español establece que el juez o tribunal debe justificar en la sentencia el grado y la extensión de la pena, permitiendo la individualización justificada y adecuada de las penas. Esta motivación asegura transparencia, proporciona a los tribunales superiores los elementos necesarios para evaluar la proporcionalidad de las penas en caso de apelación, y protege el derecho de los condenados a una sentencia fundamentada. En definitiva, el artículo 72 promueve una justicia clara y proporcional, basada en la adecuada valoración de las circunstancias del caso y en un razonamiento explícito sobre la sanción impuesta.