Artículo 367 del Código Penal español explicado

Si los hechos previstos en todos los artículos anteriores fueran realizados por imprudencia grave, se impondrán, respectivamente, las penas inferiores en grado.

Artículo 367 Código Penal

Análisis del artículo 367 del Código Penal Español

El artículo 367 del Código Penal español establece la sanción por la comisión de los delitos relacionados con la salud pública —regulados en los artículos anteriores del capítulo— cuando estos son cometidos por imprudencia grave. En este caso, las penas impuestas serán inferiores en grado a las previstas para los mismos delitos cometidos de forma dolosa (intencional).

El artículo introduce la responsabilidad penal cuando la conducta negligente de una persona, empresa o entidad pone en peligro la salud pública a través de la adulteración de alimentos, medicamentos, productos sanitarios, aguas potables u otras sustancias destinadas al consumo humano. Aunque no haya dolo (intención deliberada de causar el daño), el descuido o la negligencia grave en estas áreas puede resultar igualmente en consecuencias graves para la salud de una colectividad, y por ello también es sancionada.

Aplicación del artículo 367

Este artículo se aplica cuando los delitos recogidos en los artículos anteriores del capítulo (como la adulteración de alimentos o el suministro de sustancias prohibidas a animales) se cometen por imprudencia grave. La imprudencia grave se caracteriza por una falta de diligencia extrema, es decir, una conducta negligente que implica un alto grado de descuido o falta de previsión en la protección de la salud pública.

A diferencia de los delitos dolosos, en los que el autor tiene la intención de cometer la infracción, en el caso de la imprudencia grave no existe esa intención directa, pero el autor actúa con tal negligencia o falta de cuidado que el riesgo para la salud pública es igualmente alto.

Ejemplos de aplicación:

  1. Adulteración de alimentos por imprudencia grave: Si una empresa alimentaria no sigue los protocolos de seguridad y control de calidad, permitiendo que se utilicen aditivos peligrosos o que los productos se contaminen con sustancias nocivas, puede ser condenada por imprudencia grave. En este caso, el responsable no habría actuado con la intención de adulterar los alimentos, pero la falta de diligencia en el control de los productos pone en peligro la salud de los consumidores. Ejemplo: Un supervisor en una fábrica de alimentos omite realizar las pruebas necesarias de control de calidad y, por descuido, permite que una partida de alimentos contaminados con bacterias peligrosas llegue al mercado.
  2. Administración de sustancias prohibidas a animales por imprudencia: Si un ganadero administra accidentalmente a sus animales dosis de antibióticos u otras sustancias prohibidas sin haber comprobado previamente los reglamentos vigentes, podría ser responsable por imprudencia grave, ya que su conducta pone en riesgo la salud de los consumidores que compran los productos derivados de esos animales. Ejemplo: Un ganadero utiliza un tratamiento veterinario sin confirmar que está permitido, y los animales son sacrificados antes de que se eliminen los residuos de la sustancia, lo que provoca la distribución de carne contaminada.
  3. Contaminación del agua potable por imprudencia: Un incidente donde, por negligencia grave, se permite que sustancias nocivas entren en el suministro de agua potable podría ser castigado bajo este artículo. Aunque no haya intención de contaminar el agua, la falta de precaución o la supervisión deficiente pueden causar graves daños a la salud pública. Ejemplo: Un operador de una planta de tratamiento de agua olvida seguir los protocolos de filtrado y desinfección, permitiendo que el agua distribuida a la población contenga bacterias peligrosas.

Penas inferiores en grado

Cuando se cometen estos delitos por imprudencia grave, el artículo 367 establece que se impondrán las penas inferiores en grado a las previstas en los artículos anteriores para el mismo delito cometido de forma dolosa. Las penas inferiores en grado pueden consistir en una reducción del tiempo de prisión, una menor cantidad en la multa o una rebaja en las sanciones accesorias (como inhabilitación).

Ejemplo de reducción de pena:

Si un delito doloso de adulteración de alimentos se castiga con una pena de prisión de uno a cuatro años (como el previsto en el artículo 363), el mismo delito cometido por imprudencia grave sería castigado con una pena de prisión inferior en grado, lo que podría reducirla a entre seis meses y dos años.

Imprudencia grave y su impacto

La imprudencia grave implica una falta extrema de precaución en una situación donde era previsible el daño. En este contexto, la imprudencia grave no exime de responsabilidad penal, ya que, aunque no haya intención directa de causar el daño, el descuido o la falta de diligencia en áreas tan delicadas como la salud pública pueden tener consecuencias catastróficas.